El nivel del agua sigue subiendo y el pantano ya se encuentra al 57% de su capacidad, un dato esperanzador que hace olvidar el fantasma de las restricciones
22 ene 2008 . Actualizado a las 11:55 h.El nuevo año le ha sentado bien a Cecebre. El pantano ya comienza a parecerlo, después de que la sequía hiciese estragos. Desde el primero de enero, el nivel del agua ha subido 27 puntos y se sitúa ya al 57% de su capacidad total.
Las fuertes lluvias registradas en las últimas semanas han cambiado una tendencia preocupante. La curva descendente se agudizó a partir del pasado mes de septiembre. En apenas tres meses el agua embalsada para el consumo de A Coruña y los principales ayuntamientos de la comarca se aproximaba a la psicológica barrera del 25%, lo que supondría la necesidad de plantearse restricciones en el consumo.
Pero en apenas 20 días la situación se ha invertido. Una tendencia previsible. Las lluvias debían llegar. Y lo hicieron. Al principio, la mejoría era apenas visible. La tierra estaba seca y los caudales de los ríos Barcés y Mero, que desembocan en Cecebre, se encontraban casi vacíos. Todavía se podía llegar caminando a alguna de las islas que salpican su paisaje, algo que les costaba recordar a los más viejos del lugar.
Pero ahora ya hay menos aves en Cecebre. El espacio del que podían disfrutar se ha reducido. El agua ha vuelto y lo seguirá haciendo, si el invierno se comporta como lo que es. A pesar de que los datos son esperanzadores, Emalcsa sigue llamando al consumo responsable. También se mira al futuro con preocupación. A Coruña y su comarca crece y también el número de usuarios del agua de este embalse. El debate sobre un segundo pantano ya está en la agenda política.