Un itinerario para descubrir la belleza salvaje de Barbanza recorriendo 100 kilómetros en 24 horas

La caminata y ultratrail Os 100 do Barbanza se ha convertido en una cita ineludible para los amantes de las largas distancias. Con un itinerario de 100 kilómetros alrededor del área de Barbanza a recorrer en menos de 24 horas, la cita no competitiva gana adeptos año tras año.

Como no hay nada mejor para no parar de avanzar que dejarse absorber por la belleza de la comarca, la prueba transcurre por el medio de la naturaleza. Como novedad de este año, la aventura comenzará con una ruta en barco que forma parte del Camino A Orixe y dejará a los andariegos en Catoira.

Si bien aún no han trascendido todos los detalles del recorrido, se sabe que los caminantes atravesarán parte de la sierra de Barbanza hasta llegar a Lousame. Tras varios kilómetros campo a través, los participantes podrán oler el inconfundible aroma del salitre cuando lleguen el pie de la ría noiesa para continuar pateando por la costa hasta adentrarse en el municipio de Porto do Son.

En esta parte del recorrido, el agua volverá a ser un factor importante, pero no por el océano, sino por el río Sieira. Después de sortear el caudal que separa Caamaño y Xuño, los pasos seguirán resonando en Ribeira, esta vez en la parroquia de Oleiros. Los caminantes continuarán por el interior de A Pobra y Boiro hasta llegar de nuevo a la costa, en Rianxo.

Esta competición, si bien suele ser vista solo como un reto deportivo, también es una forma de visitar Barbanza, sobre todo esa parte más salvaje de la comarca a la que casi no se puede llegar en coche. Así lo piensa Lucía López (Cambre, 1970), la primera mujer en completar este recorrido circular el año pasado. Si bien admite que a veces se quedaba absorta mirando los paisajes y bienes patrimoniales de la comarca, la coruñesa confiesa que «para mí fue un reto más. Una prueba tan larga me pareció muy bonita. Lo que marca las diferencias es el hecho de correr de noche. Estuve cerca de 50 kilómetros sola, encontrándome con la gente en los avituallamientos. Es un poco distinto», explica la corredora, que representa los colores del club Toxos e Birras.

Duros entrenamientos

«El itinerario se puede hacer corriendo o andando, da tiempo de cualquiera de las dos formas. Aún así, requiere de cierto entrenamiento. Es una prueba que recomiendo 100 % porque me parece una experiencia única estar tantas horas haciendo una carrera. Además de la preparación física, lo más importante es la cabeza. La mayoría de las personas que corremos habitualmente largas distancias siempre decimos lo mismo», comenta

Junto con los entrenamientos, la atleta de Cambre menciona que una de las claves para completar Os 100 do Barbanza es aprovechar los puntos de avituallamiento que se instalan cada 10 kilómetros de recorrido: «En tu mente te vas poniendo retos. En mi caso es ir llegando al siguiente avituallamiento. Alcanzas uno y ya tienes el pensamiento puesto en ir a por el siguiente. Otro de los trucos es beber cada hora más o menos, es muy importante meterle algo al cuerpo y por eso debemos optimizar los avituallamientos que hay». Asimismo, Lucía López también valora la organización de la prueba, tanto por la señalización del trazado como por el gran número de voluntarios que participan en el correcto desarrollo de la actividad.

«Todo el mundo de la organización está pendiente de ti y de tu bienestar. Se agradece un montón después de tantos kilómetros. En todo momento me preguntaron cómo estaba, si iba bien o si necesitaba algo. Se portaron genial conmigo. El año pasado me despisté un poco y me desorienté. Conseguí recuperar el camino gracias a que las balizas estaban bien puestas», asegura López.

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