Se registraron temperaturas mucho más altas y bajas de lo normal
03 may 2024 . Actualizado a las 16:21 h.El nuevo orden climático que emerge como consecuencia del aumento de la temperatura global se manifiesta en forma de extremos meteorológicos y también bruscos cambios de tiempo. Europa acaba de dejar atrás un mes de abril en el que han ocurrido ambas situaciones.
En la primera quincena, las anomalías térmicas positivas fueron extremadamente altas. Basta recordar que el día 12, el termómetro alcanzó 34,5 grados en la provincia de Ourense y Vigo superó por primera vez la barrera de los 30 grados en abril. El 14 se establecieron récords en Francia, Suiza, Austria y Eslovenia. Detrás de un calor más propio del verano se encontraba la corriente en chorro. Un meandro ascendente abrazó Europa y canalizó aire cálido de origen subtropical hacia el continente.
Sin embargo, el 16 de abril, solo dos días después de que Austria registrase la máxima más alta desde que existen datos, la situación daba un vuelco. La irrupción de aire frío provocó nevadas copiosas en cotas bajas, alrededor de los 500 metros. En Alemania la nieve sembró el caos en muchas de sus carreteras.
En Galicia, el aire gélido de origen polar tardaría un poco más en llegar. El 23 se produjo un descenso térmico muy notable. El 27 daba la sorpresa una nevada en el centro de Lugo. «Abril del 2024 será recordado como uno de los cambios más increíbles jamás registrados en Europa. Algunos países han pasado del verano a invierno y tanto el calor como el frío han batido récords», reconoce el meteorólogo escocés Scott Duncan.
La situación vivida en abril refuerza la evidencia de que en el contexto actual de calentamiento se producen anomalías frías y cálidas, pero las positivas son mucho más intensas que las negativas.
Mayo ha comenzado con una combinación de temperaturas más bajas de lo normal en el sur de Europa y más altas en el norte del continente. El encuentro de las masas de aire de diferente temperatura se produjo el miércoles en Francia. Esto provocó poderosos sistemas tormentosos en el país galo e incluso que hubiese amenaza de tornados en París.
En los próximos días, las anomalías positivas volverán a afectar a la Península. Este fin de semana se encargará una borrasca y sus vientos del sur de subir las temperaturas. A partir de la semana que viene será el anticiclón. El sistema de altas presiones comenzará a canalizar aire más cálido, permitiendo que asciendan las máximas, especialmente en la mitad sur.